26/6/12

Mujeres a levantar el busto



.Las dietas,el embarazo o la genética pueden hacer que tu pecho caiga y pierda atractivo. Sencillos consejos y truquitos de estilo pueden conseguir que tu pecho suba como la espuma ¡Toma nota!

Para un pecho en su sitio, una talla ideal
Gtres
Es una de las zonas más sensuales del cuerpo femenino y requiere cuidados específicos.La prevención es fundamental para evitar que con el paso del tiempo o por causas externas como la maternidad el pechopierda firmeza y acuse un antiestético descolgamiento. Hay que tener en cuenta que los senos están formados mayoritariamente por grasa corporal, es decir, carecen de músculos y además, su piel es extremadamente frágil.

Atendiendo a estas dos características, los cuidados preventivos para mantener la firmeza de los senos deben incluir ejercicios que trabajen los músculos pectorales (que forman un auténtico sujetador natural) yrecurrir a la cosmética actual que ofrece cremas específicas, nutritivas, hidratantes y reafirmantes para mantener la elasticidad de la delicada piel de la zona

Algunas sencillas prácticas cotidianas pueden ayudarte a conseguir elevar de manera progresiva unos senos caídos. Procura caminar y sentarte con la espalda recta. Si por costumbre andas encorvada, sin darte cuenta estás haciendo que tu pecho baje más de lo oportuno con una postura inadecuada. Por otra parte, el deporte siempre es aconsejable para mejorar el estado físico general pero ¡ojo! los ejercicios de impacto, como saltar o correr, pueden perjudicar el aspecto de tus senos si no los proteges con un sujetador adecuado que impida que se muevan en exceso favoreciendo el descolgamiento prematuro.

Para luchar contra el pecho caído, cuidado con los tirantes
Gtres
Si estás decidida a que tus senos se eleven recuperando un magnífico aspecto, aprovecha estos meses de calor para practicarnatación, uno de los deportes más recomendables para desarrollar los pectorales. Otra buena práctica es terminar tuducha diaria aplicando un chorro de agua fríamientras realizas movimientos circulares en cada seno. Ayudarás así a reactivar lacirculación de la zona contribuyendo a fortalecer los tejidos.

La sujeción perfecta

Si notas que tu pecho tiende a caerse necesitas un sujetador que lo mantenga correctamente elevado sin, en ningún caso, molestar o apretar. La idea de comprar uno una talla menor de la que te corresponde para buscar así una mayor elevación es un grave error. No aplastes ni oprimas el pecho, sólo conseguirías empeorar la situación. Elige un sujetador con aros, tipo wonderbra o push up. Visualmente resultan fantásticos y poco a poco irán colocando tus senos en el lugar que les corresponde.

También es muy importante la longitud de los tirantes. Si son demasiado largos, el sujetador no estará realizando correctamente su función y si por el contrario son muy cortos, la prenda te resultará incómoda y subirá el pecho de manera forzada, poco natural. También te pueden favorecer los sujetadores que se abrochan por delante, sobre todo si además de tener el pecho caído los senos están muy separados. Este tipo de sostén suele contar con un refuerzo en la parte inferior, ideal para subir el pecho y mantenerlo en su postura correcta sin resultarte molesto. En cualquier caso, acude a alguna corsetería o tienda especializada y solicita asesoramiento sobre la prenda más adecuada para tu caso. Un buen sujetador será tu mejor aliado.

Consejos de moda

Escote ¿de qué tipo? ¡Lucha contra el pecho caído!
Gtres
No sólo importa el interior, también tu vestuario puede ayudarte a proyectar una imagen de tus senos lo más atractiva posible. Por ejemplo, si tu pecho cede más de la cuenta a la ley de la gravedad, procura evitar los escotes en V demasiado pronunciados. Te favorecerán mucho más los redondos o con forma de corazón. Tampoco tienes que renunciar al sexy escotepalabra de honor, siempre que debajo uses un sujetador idóneo con una contundente banda ancha en la parte inferior (puedes incluso añadirla tú misma, cosiendo a la prenda una tira elástica que la refuerce y te proporcione elevación extra).

A la hora de elegir tu ropa, procura desviar la atención de tu pecho. Las blusas de alegres estampados o las de rayas horizontales (nunca verticales) te sentarán especialmente bien. Otra buena idea es recurrir a los complementos como fulares o pañuelos si lo que pretendes es “camuflar” y restar protagonismo a tu pecho. Una gargantilla o un bonito collar corto (nunca largo porque acentuaría visualmente la verticalidad de los senos caídos) conseguirán un efecto similar.

24/6/12

Creo que vuelve la moda de los Corsés.


Corsés
Auque en el siglo XX el corsé victoriano era considerado por muchas mujeres como una prenda opresiva, las ventas de ropa interior que modela el cuerpo, como es el caso de los corsés, están aumentando en todo el mundo.
Beyonce, Lady Gaga, Madonna, Shakira y Miley Cyrus son algunas de las estrellas que decidieron llevar el corsé al escenario.
La página de ventas por internet Ebay reportó un aumento del 185% en la venta de corsés en los últimos tres meses. La mayoría se vendió en el Reino Unido (40%), el 34% en Estados Unidos, el 8,6% en Australia y el resto en distintas partes del mundo.Pero el incremento en las ventas indica que también las mujeres comunes y corrientes están adoptando esta indumentaria, símbolo de la era victoriana.
La cadena británica Marks & Spencer afirma que vende una pieza de la línea de lencería inspirada en los corsés cada tres minutos.
Por una parte, esto se debe simplemente a una cuestión de moda. Elboom del estilo burlesco de los últimos siete u ocho años y la popularidad de la onda de los años 50 en ambos lados del Atlántico han hecho que esta prenda se torne deseable para muchas mujeres.
"Las mujeres parecen haber tomado conciencia de la necesidad de corregir sus formas para lucir una silueta vintage, y prefieren una solución que se vea deseable a usar esos calzones de ajustados de color piel"
Maz Spencer, de la tienda "Lo que hizo Katie"
"Gracias a la explosión del estilo burlesco y a series como 'Mad Men' o películas como 'Mi vida con Marilyn', esta moda parece no estar reservada exclusivamente para las seguidores a pie juntillas de este estilo", le dijo a la BBC Maz Spencer, de la boutique londinense "Lo que hizo Katie".
"Las mujeres parecen haber tomado conciencia de la necesidad de corregir sus formas para lucir una silueta vintage, y prefieren una solución que se vea deseable a usar esos calzones ajustados de color piel".
Pero modas aparte, la fascinación y la caída en desuso del corsé cuentan la historia de la relación de las mujeres con su imagen corporal.

Idas y vueltas

Corsés
Los viejos corsés han inspirado muchas creaciones modernas, como las que luce Lady Gaga.
En la época victoriana, las mujeres adineradas usaban uno bajo su vestido.
Pero con el tiempo, muchas comenzaron a verlo como un símbolo de inferioridad frente al hombre y comenzaron a prescindir de él. En un momento dado llegó a desaparecer casi por completo.
Durante la Primera Guerra Mundial, se produjo -por decirlo de alguna manera- un asalto al corsé. Para las mujeres que trabajaban esta prenda era extremadamente incómoda, y, en algunos lugares de Estados Unidos, se les dijo que dejaran de comprarlos porque el país necesitaba usar el metal con el que estaban hechos para otras cosas.
Fue en ese mismo momento, que el sostén entró en escena.
Marilyn Monroe
Muchas mujeres aspiran a tener un cuerpo como el de Marilyn y para ello usan los corsés o las fajas.
Según explica Alison McCann, del Museo de Textiles y Moda de Londres, el rechazo del corsé fue casi una extensión del movimiento que luchaba para que las mujeres obtuviesen el derecho al voto.
"Las mujeres comenzaron a adueñarse de sus prendas íntimas y a diseñar lo que querían usar".
Pero también desparecieron con el devenir de las nuevas tendencias. En los años 20, por ejemplo, se impusieron las creaciones de Coco Channel, de un estilo más masculino y relajado.
En los 50 regresaron brevemente las curvas y los corsés que delineaban la cintura, de la mano de Christian Dior.
En los 60, las mujeres abandonaron nuevamente la tiranía de los cinturones y prendas superajustadas, como manifestación de confianza en sí mismas y símbolo de empoderamiento.
Con el tiempo la forma y los materiales que se empleaban para fabricar esta prenda fueron cambiando, y se volvió más cómoda. Pero no fue sino hasta que Madonna saltó a la fama con su vestuario inspirado en los antiguos corsés, durante su gira Blond Ambition en los 90, que la mayoría de las mujeres comenzó a interesarse otra vez en ellos.

No por moda sino por sobrepeso

Sin embargo, otra corriente de comentaristas cree que el nuevo auge del corsé tiene un origen totalmente diferente: el que las mujeres son mucho más gordas que antes.
Hannah Almassi, subeditora de la revista británica Grazia, dice que recientemente ha crecido el interés por un tipo particular de corsé: la faja.
"Es una especie de corsé compresor creado originalmente para los pacientes que se hicieron una liposucción. Vienen de Colombia, y aunque no son un invento nuevo, sí lo es la forma en que lo usan las jóvenes".
"No se parecen a los corsés tradicionales de encaje que contienen piezas metálicas, son más como una faja que estiliza gracias a la compresión que ejerce el material elástico, que empuja todo para adentro", explica Almassi.
Pero, añade, no hay que olvidar que siempre ha habido formas de manipular la imagen corporal para ajustarse a la moda, "ya sea con fajas para aplastar los pechos y darles a las mujeres una apariencia más masculina o, como en los años 80, colocando gigantescas hombreras".